¿Cómo elegir el diamante que me conviene?
Gracias a su magia y brillo incomparables, los diamantes son, con diferencia, la primera elección en joyería, especialmente para los anillos de compromiso. Si desea comprar un diamante, sin duda estará buscando el diamante perfecto.
Sin embargo, ¿existe el diamante perfecto? Hay innumerables factores que intervienen en la calificación global que determina la calidad de un diamante. Aunque las 4C son criterios institucionales para las características de los diamantes, definidos por la industria del diamante y recogidos en un certificado de diamante, su diamante perfecto no se limita a estas características objetivas.
Su propia sensibilidad
Los diamantes objetivamente perfectos, según las 4C, no están al alcance de todos los bolsillos. Sin embargo, hay muchos diamantes sorprendentes y muy interesantes en el mercado que le provocarán la misma emoción.
No existe un diamante bueno o malo. Cada diamante es único. Los criterios esenciales a tener en cuenta deben ser, en primer lugar, su propia sensibilidad, sus deseos y sus necesidades del momento. Esto es lo que hará que su diamante sea tan perfecto.
Su diamante perfecto
La compra de un diamante puede estar vinculada a un acontecimiento importante en la vida de una persona, como un compromiso, un aniversario o un nacimiento. Puede ser un recuerdo, reminiscencia del que llevaba nuestra madre o abuela; puede ser una inversión o simplemente una oportunidad para una compra de placer. Ya sea brillante, discreto, pequeño, clásico u original, el diamante tiene esa extraordinaria capacidad de desprender una emoción sin igual, sobre todo cuando es un reflejo de su personalidad.
Entendemos que los criterios para elegir un diamante van mucho más allá de las normas de calidad establecidas y deben responder sobre todo a lo que es adecuado para usted.