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Claridad del diamante

¿Qué importancia tiene la claridad de un diamante?

Las formas de los diamantes se dividen en dos grupos: los diamantes redondos y los llamados diamantes de fantasía. La forma de diamante más tradicional es el diamante redondo, también llamado talla brillante. También es el más clásico, el más universal, portador de todo el simbolismo asociado a la forma redonda. La forma de fantasía representa todas las formas de diamante distintas de la talla brillante redonda. Cada forma de diamante tiene sus propias características. Al comprar un diamante, la forma es uno de los primeros factores a tener en cuenta. La forma del diamante influye mucho en su aspecto. Más allá de las características técnicas, la forma del diamante que le atraerá es una cuestión de preferencia personal.

Las 5 categorías de claridad

FL/IF: Sin defectos

Estos diamantes no tienen inclusiones visibles con una lupa de 10 aumentos y se consideran puros, sin defectos.

Algunos pequeños defectos superficiales pueden ser visibles al microscopio sólo en los diamantes IF.

Menos del uno por ciento de todos los diamantes son de claridad FL.

Un diamante absolutamente puro es increíblemente raro, ya que es casi imposible encontrar un diamante 100% libre de inclusiones.

VVS1/VVS2: muy muy ligeramente incluido

Se necesita un microscopio para detectar los diamantes VVS, que tienen inclusiones diminutas difíciles de detectar con una lupa de 10 aumentos incluso para el ojo entrenado.

La claridad VVS es una de las más raras del diamante y da como resultado una apariencia pura a la vista.

VS1, VS2: muy poco incluido

Estos diamantes tienen inclusiones menores que sólo pueden verse con una lupa de 10 aumentos, a diferencia de la claridad VVS, que requiere el uso de un microscopio.

Sin embargo, sigue siendo diminuta y nunca será visible a simple vista.

SI1, SI2: ligeramente incluido

Las inclusiones son visibles con una ampliación x10 y generalmente invisibles a simple vista.

Sin embargo, algunas inclusiones SI2 pueden ser detectables por un ojo entrenado, dependiendo de la intensidad y la ubicación de la inclusión.

Si son puros a la vista, los diamantes SI representan a menudo la mejor relación calidad-precio.

I1, I2, I3: Inclusiones

Estos diamantes contienen inclusiones visibles a simple vista, aunque son menos evidentes en la claridad I1.

Los diamantes muy incluidos a veces presentan una claridad pobre y falta de brillo debido a la presencia excesiva de inclusiones.

A pesar de estas imperfecciones, estos diamantes también encuentran compradores porque tienen la ventaja de ser muy asequibles en cuanto a precio.

Ejemplos de inclusiones presentes en un diamante:

  • Líneas pulidas
  • Rayaduras
  • Cortes
  • Pitting
  • Chips
  • Cracks
  • Manchas claras u oscuras

¿Qué grado de claridad debo elegir para mi diamante?

Existen muchos conceptos erróneos sobre la claridad del diamante, incluida la creencia de que debe comprar un diamante con un grado de claridad alto para evitar ver las imperfecciones. Otra falsedad común es que un mayor nivel de claridad genera más brillo. Nada de esto es cierto!

Para obtener el mejor valor, elija un diamante con inclusiones que no puedan verse a simple vista, como los diamantes de los grados de claridad SI o VS. Estos diamantes son mucho menos caros y visualmente idénticos a los de grado superior.